Roberto Piñeiro (Santiago de Compostela. 12/12/1985) afronta su segunda temporada al frente de la capitanía del conjunto blanquiazul. Actualmente es el segundo máximo goleador del equipo con ocho tantos anotados.
¿En qué inviertes tu tiempo libre?
En pasear con mis amigos. Además, siempre que puedo, me entretengo conduciendo karts.
¿Cuál es tu rincón preferido de Santiago o de Galicia?
La Plaza de la Quintana.
¿Tu género de cine favorito?
Me gustan mucho las comedias.
¿Qué tipo de música te gusta más?
Escucho de todo, menos las canciones tristes y melancólicas que te hacen llorar. Un buen flamenco tampoco se escucha fácilmente (risas).
¿Mayor defecto y mayor virtud?
Quizás sea demasiado competitivo e impulsivo. En cuanto a mis virtudes, prefiero que sean los demás quienes opinen.
¿A dónde te gustaría viajar?
A cualquier sitio de sol y playa. Y siempre en buena compañía.
¿Quién es tu ídolo futbolístico?
Desde niño me gustó Stoichkov y Mostovoi. Hoy en día, me quedo con Xavi Hernández.
¿De qué equipo eres aficionado?
De la S.D. Composela, ya que he vivido casi todo en esta casa. Pero también disfruto viendo ganar al F.C. Barcelona y al Atlético de Madrid.
¿Con qué compañero te llevas mejor en el vestuario?
La verdad es que me llevo fenomenal con todos, aunque me divierto mucho vacilando a “Pedaladas” (Diego Penas).
¿Qué balance harías de tu estancia en la S.D. Compostela?
Este club me lo dio todo a nivel futbolístico. Crecí y me formé en su seno. Tuve muchas alegrías y algún que otro disgusto (que ya quedó en el olvido). Ahora mismo, es un club serio, en el que trabajan grandes personas para volver a acercar al Compostela a la ciudad y a la afición, para conseguir, entre todos, llevar a la Esedé a la categoría que se merece.
La verdad es que me llevo fantásticamente con todos, aunque disfruto mucho vacilando a “Pedaladas” (Diego Penas).
1. Un balance de tu estancia en la S.D. Compostela y opinión del club
Este club me lo dio todo a nivel futbolístico. Crecí y me formé en su seno. Tuve muchas alegrías y algún que otro disgusto ( que ya quedó en el olvido). Ahora mismo, es un club serio, en el que trabajan grandes personas para volver a acercar al Compostela a la ciudad y a la afición para conseguir, entre todos, llevar a la Esedé a la categoría que se merece.