Un 26 de junio de 1962 un modesto club santiagués decidió emprender carrera futbolística dentro de Galicia y España. Así, la S.D. Compostela quedaba constituida como tal hace hoy cincuenta años. Medio siglo de vida en el que el Compos vivió momentos de todo tipo, puesto que los altibajos fueron una constante en su vida.
La historia del Compostela comenzó a escribirse en categoría regional de la mano de Dagoberto Moll, quien en tan sólo un año (temporada 1962-1963) consiguió el ascenso a Tercera División con una plantilla solvente y entregada. Les llamaban “los chicos del 0-3” porque todos los partidos que jugaban fuera de casa los ganaban con ese resultado.
Respaldado permanentemente por su afición, la Esedé llegó a jugar en todas las categorías del fútbol nacional. Hasta el momento, su etapa más brillante transcurrió en la década de los 90, consiguiendo militar cuatro temporadas en la Primera División. Por el estadio de San Lázaro pasaron los mejores equipos y mejores jugadores de España. Santiago presumía de equipo y el Compos ejercía de abanderado de la capital gallega por todo el ámbito nacional. El Compostela brilló en la liga de Primera División. En 1996 consiguió llevarse el subcampeonato de invierno, por delante de clubes como el Barcelona y el Real Madrid.
Tras el descenso de categoría, el club entró en una situación convulsa debido a los malos resultados y dificultades económicas que lo condujeron a una etapa de descensos.
Este año, 2012, es el año del Compos. Ha vuelto a renacer. Su afición ha vuelto a ilusionarse y a apoyar al equipo. En esta temporada la Esedé realizó una campaña extraordinaria, consiguiendo todos los títulos posibles: ascenso, campeón grupo y campeonato categoría.
El Compos está vivo. Ha llegado a los 50 en un estado de rejuvenecimiento. Ahora sólo quiere seguir creciendo para sumar años a su historia y regalar a esa afición incondicional momentos de gloria.