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Yago Iglesias está encantado con la gran respuesta de la afición para viajar a Salamanca
Santiago de Compostela, a 15 de junio de 2018.
El gran reto está cada vez más cerca. A la SD Compostela sólo le falta un paso para lograr el sueño del ascenso, pero para ello deberá superar al CF Salmantino UDS en la Final del Playoff de Ascenso a la Segunda B, una eliminatoria igualada, disputada en dos campos históricos, y de la que únicamente podrá salir un vencedor.
Este domingo, a las 12.00 horas, el Estadio Helmántico vivirá la primera parte de este gran duelo en un escenario emblemático y con dos aficiones que llenarán el campo, ya que a la gran masa local se unirá unos 450 aficionados santiagueses que se han sumado al gran desembarco blanquiazul en Salamanca.
“Es fantástico que venga tanta gente. Llevamos toda la semana recordando lo del domingo pasado y que se sumen tantas personas a viajar a Salamanca es muy importante para nosotros”, señaló Yago Iglesias en rueda de prensa. Al igual que dijeron los jugadores a lo largo de la semana, uno de los aspectos más positivos del rival era la cercanía entre ciudades y ya se empieza a notar. “Somos dos clubs similares, hay un hermanamiento entre aficiones y será muy bonito, por lo que sólo nos queda hacer un gran partido y que la gente disfrute”, explicó el técnico.
Sin duda, la alegría lograda tras la gran remontada ante el Terrassa FC ayuda mucho a todos, pero esto es ya pasado y hay que pensar en lo que queda por delante. “El fútbol no te permite un descanso, tuvimos el lunes y martes para saborearlo, pero a partir del miércoles ya tenemos la mente puesta en nuestro nuevo rival”, argumentó. Con todo, esa energía positiva les permite “tener un poso para afrontar, con más ilusión todavía, esta última eliminatoria”, dijo Yago.
Aún así, estas condiciones también las ha vivido el equipo local, luego de lograr el pase a la final en la prórroga contra el Mutilvera. “Las dos venimos de una situación pareja, porque teníamos que remontar, por lo que es una experiencia que queda ahí y que nos sirve de punto de partida para volver a repetirlo en diez días y que sea ya definitivo”, comentó el entrenador.
Para llegar a ese objetivo, el cuerpo técnico y jugadores saben que será una eliminatoria larga, en la que buscarán volver vivos a San Lázaro, “para darle la estocada aquí”.
En cuanto al rival, Yago expresó sus conclusiones tras visualizar varios partidos de los charros. “Son un rival que no le pierde nunca la cara al encuentro, no sólo en el playoff, sino también en la temporada, clasificándose en las dos últimas jornadas. Después, llevan los partidos hasta al final, porque explotan mucho el potencial físico de su delantera, con gente como Murci, Garban o Ortiz, que son muy buenos en el uno contra uno y marcan las diferencias en el área”, analizó el ribeirense.
Con esto, Yago los considera como “un gran equipo, que son los que mejor han hecho las cosas y por eso están aquí”. Además, añadió que son el hueso más duro de este playoff, tanto por su potencial, como por el aspecto anímico. Precisamente, respecto de lo último, el técnico tiene la duda de como afrontará el equipo este primer duelo. “No dejamos de ser un club modesto, que no estamos acostumbrados a tanta afición en contra, por lo que será muy importante que se desplace mucha gente de Santiago y que se haga notar por encima de los suyos”, destacó.
Con todo, también saben, aunque han cambiado dos veces de entrenador y eso dificulta el trabajo, que no se sienten cómodos cuando el rival es vertical y les obliga a correr para atrás, “sobre todo, por las dimensiones del campo”.
Así, buscando destacar las fortalezas propias por encima de las debilidades, Yago se lleva a los 20 jugadores, tanto para poder elegir los que mejor se adapten a su planteamiento, como para “disfrutar de esta experiencia, porque estas convivencias también forman parte del premio”. Elegirá a los más convenientes para conseguir ser el Compostela a lo largo del año.
Los jugadores darán el 100 % y la gran afición desplazada a Salamanca animará desde el minuto uno hasta el último segundo. El objetivo está claro: asentar la primera piedra en este último paso para lograr un sueño, el ascenso.
